Independientemente del lugar de procedencia y de la historia de cada persona, cuando nos hablan de infancia, todos tenemos en el subconsciente un imaginario al que nos remitimos. En nuestro caso –el de los europeos–, nos viene a la cabeza un niño/a de una familia tradicional (padre y madre), acudiendo al colegio, jugando en un parque con otros niños/as, etc., con todas sus necesidades cubiertas.
No se nos ocurre pensar en el niño/a africano cuidando del ganado familiar, del niño/a iraquí que huye de una guerra, del niño/a que tiene que vender caramelos en la calle de México para ayudar a su familia… Es verdad que no se puede generalizar. En cada continente, en cada país encontramos niños/as en todo tipo de situaciones.
Pero un día como hoy, 20 de noviembre, “día universal del niño/a”, queremos visibilizar a todos los niños/as del mundo. A aquellos que felizmente tienen todas sus necesidades cubiertas, y también a los que cada día, por desgracia, tienen que luchar para sobrevivir.
La preocupación por la infancia está presente en el día a día de la mayor parte de las personas. Pero como sociedad, para concienciarnos, para festejar los avances o seguir luchando contra las injusticias, es bueno que un día todos juntos lo recordemos.
Los niños son el colectivo más vulnerable, los que más sufren las guerras y crisis humanitarias (principales victimas de le pobreza). En 2017, murieron en el mundo por causas prevenibles 2´5 millones de niños menores antes de cumplir un mes y 3´1 millones antes de cumplir 5 años. Hoy, 385 millones de niños están en una situación de pobreza extrema y 264 millones no están escolarizados. El trafico infantil se ha convertido en un negocio para los traficantes. Son muchas las personas involucradas, que se coordinan para traficar con menores que son utilizados como esclavos para mendigar, robar, esclavitud sexual o tráfico de órganos.
Centrándonos en Perú, país al que corresponden las fotos que publicamos, a pesar de ser un país que hoy se encuentra en vías de desarrollo, y haber tenido un crecimiento sostenido a lo largo de los últimos 17 años, seguimos encontrando grandes problemas en la infancia.
En el ámbito de la salud y el desarrollo infantil, se ha incrementado el porcentaje de mujeres que acceden a los controles prenatales, se ha disminuido la tasa de mortalidad infantil hasta un 17 de cada 1000 nacidos vivos (ENDES 2016).
Pero persisten otros problemas graves como son la desnutrición crónica (13´1%), la anemia (43,6%), el limitado acceso a la educación inicial y secundaria, etc., todos ellos grandes retos a los que el Estado peruano tiene aún que hacer frente.
A continuación, recogemos otros datos referidos al Perú, que nos ayudan a tener una idea más completa de la situación:
- 73,8% de niños/as de 9 a 11 años, y el 81,3% de adolescentes entre 12 y 17 años, manifestaron en 2015 que alguna vez en su vida fueron víctimas de violencia psicológica o física.
- 26,3% de las madres y 24,1% de los padres emplearon el castigo físico con sus hijas e hijos en 2015.
- 8,748 menores de edad estaban acogidos en diversas instituciones en 2012.
- 832,000 niñas y niños de 6 a 13 años trabajaban en 2011; el 37% del grupo de 14 a 17 trabajaba más de 36 horas a la semana.
- 27% de las víctimas de trata fueron menores de edad, mayoritariamente niñas, entre 2011 y 2013.
- 13,6% de las adolescentes de 15 a 19 años quedaban embarazadas según el un estudio realizado en 2015. En algunas zonas de la selva este porcentaje llegó al 33%.
- Solo el 68,6% de las y los adolescentes culminaron oportunamente la educación secundaria, 2015. En algunas zonas de la Amazonía este porcentaje llegó al 38,6%.
- 30% de los hogares no dispone de red pública de agua, en algunas zonas de la Amazonía esta cifra alcanza 70%. El 27% carece de red pública de desagüe, situación que pone en riesgo la salud de niñas y niños.
- Solo 13% de niñas y niños menores de 4 años tuvo acceso a programas de Desarrollo infantil temprano en 2015.
- 383,000 niñas y niños menores de 12 años todavía están fuera del sistema educativo y más de 643,000 se encuentran en riesgo de abandonarlo.
Por ello vamos a exponer una serie de fotos, contando la historia de cada una de ellas:
Foto 1
La primera foto fue realizada a las afueras de la ciudad de Piura (Perú), iba con una amiga visitando a los padres de unos menores que acuden cada día a un proyecto de ayuda social. Dicho proyecto trabaja para que los menores continúen su educación y tengan una infancia como cualquier otro niño/a.
Mientras mi amiga conversaba con los padres, vi a tres niños a lo lejos caminando, iban con mochila, por la hora supuse que irían a la escuela.
La zona era desértica, mirabas hacia los alrededores y solo se veían dunas de arena y algunas casas de adobe y paja o calaminas.
Me pareció curiosa la escena de los tres menores en medio de la nada, sin ningún adulto… camino del colegio. Por ello saqué mi cámara de fotos y de repente vi que me miraban y empezaron a correr.
Rápidamente me vino a la cabeza… ¿habrán imaginado que la cámara era un arma? ¿Creían que les iba a hacer daño? ¿Qué situaciones habrán vivido para huir de esa forma al ver que les enfocaba con una cámara?…
Foto 2
La segunda foto fue realizada en un mirador de camino del Valle Sagrado de los incas a la ciudad de Cusco.
En ese mirador es muy típico la venta de productos artesanales a los turistas que paran a descansar. Mientras las señoras atendían a los turistas que iban y venían, había un niño vestido con un traje típico “comiendo unas papitas”.
¿Qué motivo obliga a su madre a tener que llevar con ella a su hijo de aproximadamente 4 o 5 años, mientras trabaja? ¿No tiene a otra persona que pueda hacerse cargo de él?…
Desde la mentalidad europea, en ningún momento se nos ocurriría dejar a nuestro hijo/a sin una constante atención.
¿Tu hijo/a comiendo en el suelo sin lavarse las manos? ¿Sin protector solar? ¡Sin jugar… puf qué escandalo!
Foto 3
Foto 4
Las siguientes fotos pertenecen a los niños/as de la ludoteca de “CANAT” (Piura), muchos de esos niños/as trabajan en la calle vendiendo dulces o fruta, recogiendo plástico en vertederos o cargando mercancías en los mercados. Intentando ayudar económicamente a sus familias.
Esta ludoteca se encuentra en una zona muy peligrosa, muy pocos coches quieren ir a esa zona ya que no está asfaltada y de vez en cuando hay tiroteos.
Organizaciones como CANAT intentan proporcionar a estos niños un espacio de juego, herramientas para que continúen su formación…darles una oportunidad para que tengan una infancia como cualquier otro niño/a.
Viendo estas imágenes tan alarmantes, no nos imaginaríamos que, a pesar de la pobreza, estos menores, gracias a proyectos como este, logran jugar, reír, aprender… La esperanza, solemos decir, es lo último que se pierde, y realmente en medio de tanta carencia, proyectos como estos, logran mantener viva la esperanza de los niños.
La infancia es un reto al que debemos hacer frente, tanto desde los gobiernos como desde la sociedad civil, con sus organizaciones e instituciones y con el compromiso de multitud de personas individualmente. No podemos permitir que niños/as inocentes vean y sufran tantas injusticias. Cualquier niño/a del mundo debería poder disfrutar de su infancia.
Días como hoy nos permiten detenernos un minuto y reflexionar: ¿Qué herencia queremos dejar a las generaciones futuras? ¿Qué valores estamos transmitiendo? ¿Qué es lo correcto e incorrecto?…
Esperamos que estas imágenes nos abran los ojos sobre esta situación y juntos/as pongamos nuestro granito de arena para encontrar soluciones adecuadas.
